Botánica:
El aceite de hibisco es un aceite obtenido por presión en frío de las semillas contenidas en las cápsulas de los frutos que se abren en la madurez. El hibisco es un arbusto de la familia de las malváceas que se encuentra en África, India y Asia. Puede crecer hasta 5 m de altura y tiene flores de colores. Las flores rojas se secan y luego se infusionan y se consumen como bebida (bissap, ¡qué delicia!) o en mermelada. Muy ricas en antocianinas, tienen propiedades nutricionales fortificantes.
Fabricación:
En una prensa de tornillo, las semillas sanas y limpias se prensan en una primera prensa en frío, sin ninguna intervención de disolventes o productos químicos. A continuación, el aceite se filtra sucesivamente sobre papel secante. A continuación, el aceite se almacena lejos de la luz y el calor. No contiene aditivos.
Propiedades:
El aceite de hibisco es un aceite cosmético activo con un alto contenido en ácidos grasos poliinsaturados omega-6: ácido linoleico C18:2 y ácido gamma-linolénico C18:3. Estos dos ácidos grasos esenciales para la piel intervienen en la fluidez de la membrana y favorecen la función de barrera de la epidermis. Estos ácidos grasos contribuyen positivamente a frenar la pérdida insensible de agua de la piel. También rico en tocoferoles antioxidantes, el aceite de hibisco protege las células del envejecimiento oxidativo, lo que lo convierte en el aceite preferido para las pieles maduras y el cuidado antienvejecimiento e hidratante de la piel.
Certificado por ECOCERT SAS (F-32600)